Es una disciplina que ayuda a las personas a recuperar y mejorar su capacidad para realizar actividades diarias significativas. Está dirigida a personas de todas las edades con problemas físicos, psicológicos, sensoriales o cognitivos y, emocionales con el objetivo de promover la independencia funcional, la participación social y la calidad de vida a través de actividades vinculadas con el cuidado de sí mismo, hasta el desarrollo de habilidades comunicativas y de relación con otras personas.
Las actividades principalmente están enfocadas en tres aspectos :
1) Actividades de la vida diaria (AVD): autocuidado: alimentación, higiene, vestido y deambulación; movilidad, habilidades sociales y habilidades instrumentales.
2) Juego: Con el fin del esparcimiento tanto mental como físico aliviando el estrés.
3) Trabajo: Se incluyen las tareas domésticas, talleres manuales, orientación y reorientación laboral.