Es una psicoterapia utilizada para resolver los conflictos que pueden surgir dentro de una relación de pareja. Sus técnicas ayudan a fortalecer una pareja en crisis y encontrar el verdadero problema para así recuperar la relación o también para tener una ruptura lo menos conflictiva y dolorosa posible.
Durante la terapia se generan nuevas posibilidades, pautas más creativas y aprendizajes para la solución a sus conflictos, cambiar algunas conductas dañinas, asumir sus problemas y mejorar sus canales comunicativos. Además encontrar el camino correcto al ser consciente de las virtudes y debilidades, tolerar y respetar las diferencias, aprender a leer las señales y emociones del otro, expresar los sentimientos con más claridad, entender y regular las emociones propias, comprender que el amor por sí mismo no es suficiente para mantener una relación estable y duradera; pues se requiere compromiso, comunicación, respeto y compasión y, potencializar la capacidad de fluir con la vida dependiendo del ciclo vital de cada pareja.